CONCURSO pabellòn ITALIA EXPO 2015
4to. puesto (empate)
El diseño para el Edificio de Italia toma el cuerpo y el alma de la idea de que el hombre, a través de la actividad manual e intelectual, interactúa con el medio ambiente que lo rodea, el medio ambiente al que pertenece en todos los aspectos.
De ahí el doble sentido y la interpretación que caracteriza a la palabras CULTURA.
El emblemático edificio con una connotación fuerte, y el corazón de la presencia italiana en la exposición, se basa arquitectónica y simbólicamente en la esencia del árbol, que desde siempre, es una metáfora de la vida en armonía con la naturaleza - de ahí Árbol de la Vida. La esencia del árbol se ve en sus aspectos individuales relacionados con la energía, los alimentos y la vivienda que en el tronco, las raíces y las hojas pueden ofrecer a la existencia humana. El Edificio Italia une estos tres aspectos con el fin de definir una arquitectura que interactúa con los elementos naturales y con la vida de las personas. -
El edificio, como las hojas de los árboles que reaccionan a la luz, tiene una piel fotosensible capaz de producir energía limpia a través de la luz del sol, mientras que las raíces profundas y aéreas extraen el alimento del suelo que absorbe el agua de lluvia, el edificio a través de la «aguas subterráneas produce el frío y el calor (que contribuyen a nuestro bienestar) con la temperatura natural de la tierra.
Como el árbol permite bajo de sus hojas el encontrar refugio y consuelo del calor o de los elementos, de la misma manera el Edificio Italia recibirá a visitantes de todo el mundo para darle refugio y alimento para la mente.
El edificio interpreta en clave contemporánea la tradiciòn del espacio público como la plaza, el patio o el pòrtico. El proyecto toma vida a partir de la relación que se crea entre la planta baja libre de limitaciones y el espacio del Cardo(En las ciudades romanas de las provincias y colonias, con una planta similar a los campamento smilitares, CARDO era la carretera principal, que corria de norte a sur, cruzando en el centro la calle secundaria, llamada decumano, que corría de este a oeste).
El patio, entendido como un espacio doméstico y familiar, desarrollado de cielo a tierra con cientos de cestas colgantes donde crecen los aromas y sabores de la cocina italiana, mediterránea, un "corazón" sensorial y tipológico para reconocer la identidad de la nación anfitriona.
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